Fabian Picardo ha
concedido estos días una entrevista con motivo de sus tres años de mandato y ha
dejado un titular que es imposible pasar por alto. El ministro principal de
Gibraltar ha aseverado que si el Gobierno español colabora con el Peñón es
posible acabar con el paro en la comarca en cinco años. En concreto, Picardo ha
afirmado que, si se abre un nuevo marco de cooperación, se pueden crear 40.000
empleos en el próximo lustro en el arco de la Bahía de Algeciras (aunque él la
denomine “Bahía de Gibraltar”). No sé si el mensaje de Picardo es un brindis al
sol o una nueva forma de presionar al Gobierno de Rajoy, ya que no detalla cómo
pretende acabar con esta lacra que azota a la comarca. Si está utilizando este
discurso como arma arrojadiza, se trataría de la mayor vileza de la condición
humana, ya que está jugando con el drama de miles de familias. Sin embargo, puede
que Picardo se crea lo que dice, ya que no es la primera vez que apunta a este
objetivo. Y cuando estas palabras salen del gobernante de la población con la
tercera mayor renta per cápita del mundo, que convive con una comarca a la
cabeza del desempleo en España, entiendo que no sólo hay que escucharlo con
atención sino también sentarse con él a dialogar. No se pierde nada con ello.
Fabian Picardo. Foto: telegraph.co.uk |
El ministro de Asuntos
Exteriores patrio, José Manuel García-Margallo, cuando ocupó el cargo, se
estrenó con la histórica reclamación del “Gibraltar español”. Una declaración
de intenciones que dejaba claro su propósito de enterrar el Foro de Diálogo
Tripartito auspiciado por el PSOE y de retomar las conversaciones bilaterales
con Reino Unido respecto a la soberanía de la Roca. Ahora, tras tres años de
legislatura del PP, podemos afirmar que no se ha avanzado en ninguno de estos
caminos. La cooperación entre vecinos sigue congelada y Londres no ha dado
ninguna muestra de que esté dispuesto a negociar ninguna retrocesión de la
colonia británica.
En la retina y carne de
los campogibraltareños sólo nos ha quedado meses de tensión y confrontación con
Gibraltar. Disputa por las aguas, incidentes entre patrulleras en la bahía,
intensificación de los controles en la Verja o insufribles colas en la frontera
han sido el pan nuestro de cada día. Tiempo suficiente para intentar pasar
página y empezar a poner en marcha esas “reuniones ad hoc de geometría
variable” a las que apuntó hace ya tiempo el propio García-Margallo. Y no digo
yo que se renuncie a nada ni se deje de combatir el contrabando de tabaco.
Simplemente, que no nos quedemos en eso. Sólo que se exploren otras vías que
puedan ser beneficiosas para todas las partes.
El Ayuntamiento de La
Línea ha reclamado participar en esas reuniones como parte afectada. Algo que
apoya Picardo y que no se ve con malos ojos entre parte del PP local. Una buena
ocasión por tanto para retomar el diálogo, aunque sea en temas domésticos de la
comarca, y para que el ministro principal de Gibraltar pueda poner sobre la
mesa esa ‘fórmula mágica’ contra el paro. Una oportunidad para que se empiece a
hablar de proyectos conjuntos y comprobemos el verdadero compromiso de cada uno
por sacar al Campo de Gibraltar de la ruina laboral.
Por fin parece que los gobiernos se han decidido a hablar y van a empezar a dialogar en las reuniones ad hoc. Creo que esto va a beneficiar a la comarca del Campo de Gibraltar. Te dejo mi impresión en esta entrada en mi blog
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