Cuando se cierra una puerta, se abre una ventana. Así quiero pensar. Llevo más de una década dedicándome al periodismo: informando, analizando y opinando sobre lo que me rodea. Hace unos meses me vi forzado a interrumpir mi actividad, con la sensación de que estaba perdiendo mi dignidad profesional y de que algunos estaban empeñados en despojarme también de la personal. Una etapa de mi vida que ya está enterrada. Ahora toca afrontar el futuro con optimismo, reciclarse y adentrarse en nuevas aventuras.
Esta maldita crisis ha dejado a millones de personas en el paro, ha instaurado el precariado -prendiendo fuego a los derechos sociales que tanto han costado conseguir- y ha acrecentado la sumisión de los medios de comunicación al poder político. La libertad de prensa escasea. Las líneas editoriales las escriben las subvenciones. Por ello, no extraña que cada vez más los ciudadanos busquen otras vías para informarse al margen de los medios tradicionales. Internet y las redes sociales han abierto un nuevo camino. Ahora se accede a los contenidos a la carta y los ciudadanos tienen todas las herramientas necesarias a su alcance para formarse una opinión, a salvo de las manipulaciones, y poder expresarse.
Desconozco si podré seguir ganándome la vida como periodista, lo que no significa que esté dispuesto a darle la espalda a mi vocación. Y para ello cuento con este nuevo espacio. Para desarrollarla con humildad y libertad. Mi único objetivo es seguir haciendo lo que me gusta: escribir sobre lo que acontece en mi tierra. Y lo voy a hacer desde esta buhardilla, que ya tiene la ventana abierta, para que me pueda asomar de forma indiscreta al Campo de Gibraltar.
Enhorabuena por abrir la ventana. Los procesos políticos e crises economicas sirven para dos cosas basicamente: acomodar a la gente o incomodar a la gente. Cuanto mayor nivel de percepcion y informacion, mas preparada estará la gente y más incomodada cuanto a sus problemas. En un país como España, no veo claro donde quiere llegar la gente, ya que con la famosa crisis, nadie se da cuenta de que mas problemas viene anadidos. Contratos basura, salud basura, derechos basura , y la falta de libertad de opiniao reflejan aquellos años del coturno, tan sombrios cuanto odiados. Tener un canal donde expresar ideias y descontentamientos parece ser una luz al final del tunel. Sólo espero que no sea el tren en sentido contrario.
ResponderEliminarGracias por tu comentario y tu reflexión
EliminarÁnimo y felicidades
ResponderEliminarMe encanta!!!!!!
ResponderEliminarDios aprieta pero no ahoga... y si el "portazo" puede propiciar tu reencuentro contigo mismo y poner en paz tu acallada conciencia, bienvenido sea.
ResponderEliminarAnimo y a dejar aflorar ahora todo lo que sin duda llevas dentro.
(Un comentario: afina la puntería que hay pájaros por todas partes...)
UNO.
Tomo nota UNO que veo afinas bien en tus comentarios. Gracias de nuevo
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